domingo, 29 de diciembre de 2013

Cicatrices, mapas de la vida

Cuando nacemos somos un lienzo en blanco que la vida va pintando con diferentes cosas, donde quedan cicatrices, antiguos geleogríficos que cuentan nuestra vida.

Calculo que no debo ser la única pero amo las cicatrices, amo lo diferente. Podría quedarme horas mirando una marca en la piel de alguien.

En mi vida he recolectado muchas marcas en mi piel que se pueden ver, las que no, otras que sólo yo sé donde están y otras de las que soy inconsciente. Todas cuentan historias, desde mi ombligo, hasta mi más última adquisición.

Sucedió anoche, por el cumpleaños de la Verdosa al fin nos volvimos a reunir y la pequeña Rosada había regresado a la ciudad. Ella no se puede quedar quieta y en un momento casi se cae de espaldas en la silla. Sinceramente no sé cómo hice para sostenerla y en ese momento me hice un rasponcito.

El rasponcito está en mi antebrazo izquierdo y escribo esto por que mientras tipeaba lo vi en mi brazo, ahí, chiquito y lindo. Calculo que si fuera más blanca sería rosita como ella y no puedo evitar mirar mi nueva marquita con cierta ternura.

Sé que si me la hubiera hecho sola no sería lo mismo y no sería tan linda. Ella cuando la vio me pidió disculpas y sé que hasta se sintió un poco mal, pero yo no quiero que se sienta así. Amo mi marquita y mientras la veo sé que algún día sanara y quedará una marquita que después no se verá mas pero a mi, ahora en este instante, me gustaría tenerla por un tiempo más.

martes, 10 de diciembre de 2013

Destinadas a ser Medusa


La frase se me cruzó por la cabeza cuando volvía a casa y como de costumbre, en la construcción de cerca, los hombres de ahí me gritaron cosas. No puedo simplemente ignorarlos, hay veces que tengo ganas de cruzar la calle y romperles la mandíbula con un ladrillo... pero bueno, eso no puedo hacerlo.

Lo más gracioso de todo es que tengo un negocio cerca también y ellos van a comprar, no sé si son los mismos tipos pero sólo hay uno amable y los demás, no sé, serán ellos los que me gritan cosas? Lo peor del caso es que si les digo algo jamáaaas de los jamases van a entender lo que se siente, pues nunca tan bien usada la frase, son hombres.

Cuando los hombres crecen nunca les dicen "NUNCA andes solo", "siempre lleva el teléfono por si acaso", nosotras no somos totalmente libres de usar una minifalda, aunque nos guste, por que provocaríamos a cualquier hombre a que nos digan cosas en la calle o que nos violen. Los hombres no saben lo que se siente cuando caminas por la calle y babosos te gritan de todo menos "buen día señorita"

Por eso me acordé de Medusa. Aunque muchos no lo sepan, la historia es bastante trágica. La más hermosa del pueblo, deseada por todos los hombres era sacerdotisa del la diosa virgen de la sabiduría, Atena. Pero eso no impediría el deseo de un dios, es así como Poseidón la violó en pleno santuario. Creen que lo castigaron por esto? No por Zeus! es hombre y es un dios, ella fue tomada culpable por que lo tentó he hizo que al final actuara como actuó. Fue así que no solo Medusa tuvo que dejar de ser algo que amaba, ser sacerdotisa, también al ser violada luego no podría casarse bien y la diosa a la que más amó le paga convirtiéndola en un mounstro que convierte en piedra aquel que vea sus ojos.

Todas seremos Medusa? No todas, pero día a día una pasa mas o menos por el mismo sentimiento una y otra y otra vez.